Toques, toques! La terapia con electricidad para diversos tratamientos
¿Qué le recetará su médico en su próxima consulta? Puede ser… electricidad!
Los científicos dicen que el uso de corrientes eléctricas para estimular el sistema nervioso podría usarse para tratar desde la artritis hasta el alcoholismo.(Aunque se despachan más toques en cantinas que en clínicas!)
Más de 100.000 personas ya han recibido tratamiento para la epilepsia resistente a los medicamentos usando un dispositivo que aplica impulsos eléctricos al cerebro a intervalos regulares.
Asimismo, investigadores en el Reino Unido han intentado usar corrientes eléctricas para restaurar el control de la vejiga en pacientes con lesiones espinales.
Antecedentes: La tradición, la costumbre o el negocio de los toques en México data de ya varias décadas. Aunque no hay investigación social o antropológica de ello, pero lo que si les podemos compartir es el video a continuación:
Las «cajas de toques» son fáciles de fabricar: Por fuera, una caja de puros forrada o en madera natural, un botón on/off tipo licuadora clásica y una perilla giratoria roja, ésta última con la finalidad de ir de menos a más, para que los usuarios o clientes vivan el cosquilleo paulatino y no la sacudida de una descarga; así que por medio de dos polos o manerales metálicos que se parecen mucho a los manubrios de una bici, que se toman en cada mano se inicia con la experiencia de la caja de toques.
Por dentro, la misma caja guarda, también en un orden obsesivo, los secretos del toque que todo lo puede, que todo lo cura.
Los secretos están depositados en los voltios de las baterías, conectadas a los botones de afuera, por medio de cables de colores.
Puedes comprar un Kit de caja de toques para armar en Tiendas en Línea o en sitios web como Mercado Libre o en Tiendas de electrónica establecidas, para que tengas tu propia caja para tus terapia de descagas eléctricas… y de risa. De las dos formas es terapeutico.
Y desde antes de ser popular en México…
La electricidad era un pequeño misterio a finales del siglo XIX. En aquella época las investigaciones de ciertos científicos trataban de determinar el efecto de la electricidad en el cuerpo humano, y en algunos casos se afirmaba que en pequeñas dosis las descargas podían ser beneficiosas para la salud.
En el libro «Arcades and Slot Machines» escrito por Paul Braithwaite, encontramos una de las primeras aplicaciones de aquellas suposiciones: una patente de una máquina de vending que ofrecía pequeñas descargas eléctricas a cambio de dinero.
La patente, con el título de «Aparato eléctrico operado con monedas», fue registrada por Norman W. Russ y concedida en Inglaterra en 1886, y su creador la registró en otros países como Francia, Bélgica, Canadá o los Estados Unidos, donde se la concedieron en mayo de 1888.
La máquina funcionaba con un principio muy simple que hacía que tras introducir la moneda y pulsar el pedal de la máquina se cerrase un circuito que proporcionaba una corriente eléctrica. Dicha corriente podía variar en intensidad según la persona manejase una de las dos empuñaduras que sobresalían de la caja que contenía el resto de los componentes.
En la patente no hay especificación alguna sobre la corriente eléctrica suministrada, y tampoco explicaciones sobre los teóricos beneficios de tales descargas, pero ya décadas antes habían aparecido investigaciones médicas sobre el llamado «galvanismo» que, suponían algunos, ayudaba a curar enfermedades e incluso -como antecedente del desfibrilador cardíaco- reanimar un cuerpo muerto.
Así que si desde hace tanto tiempo ya sabemos todo eso, entonces ¿Por que no usar de vez en cuando una caja de toques?
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Temas: "Toques", cajas de toques, juego o esparcimiento, relajación, terapia, toques toques, tratamientos
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