Arena Martínez, la diseñadora madrileña que triunfa plasmando cuadros de artistas nacionales en la ropa
Moda y arte se complementan perfectamente. Y así lo demuestran los ejemplos de la unión de ambas disciplinas que hemos visto a lo largo del tiempo. Desde colecciones inspiradas en diversos estilos artísticos a prendas convertidas en obras de arte portátiles. Una práctica que saltó a la fama ya en 1965 cuando Yves Saint Laurent se inspira en la obra de Piet Mondrian y la diseñadora madrileña Arena Martínez domina. La joven emprendedora ha llevado al extremo esta unión sirviéndose de su ojo artístico para crear colecciones de moda y se ha convertido en un icono.
Arena Martínez destaca por centrar cada una de sus colecciones en un artista contemporáneo único, al que se toma el tiempo de conocer trasladándose hasta su estudio y sumergiéndose en su obra para entender toda la esencia y la pasión que pone en su trabajo.
Su trabajo comprende piezas de todo tipo como sombreros, vestidos y fundas para el móvil a las que la diseñadora traslada cuadros de museo. Su última colaboración con la famosa firma de mascarillas Kausi ha revitalizado el accesorio made in Spain por excelencia: el abanico, además de explorar el que es el nuevo complemento de fondo de armario: la mascarilla.
Además de dedicarse al diseño de moda, Martínez siente la necesidad de expresarse a través de la pintura. Y esta vez ha sido su arte el que se ha transportado a los abanicos y mascarillas, al igual que lo hace ella con las obras de otros artistas.
Gracias a KAUSI y con ocasión del lanzamiento de su colección conjunta, hablamos con ella para conocerla un poco más:
¿Cómo decides juntar arte y moda? Cada vez vemos más ejemplos de esta unión, pero antes no era tan común, ¿cuál era tu propósito?
«Nadie veía la maravillosa obra que tenía en el estudio y sentí la necesidad de sacarla»
Mi idea de juntar arte y moda surgió de una necesidad de juntar mis dos pasiones y ocurrió en el momento en el que mi padre que es artista (Papartus) decidió parar de exponer, que no de pintar.
Un par de años después, veía la maravillosa obra que tenía en el estudio y nadie veía y sentí la necesidad de sacarla para que llegara a la gente. De ahí la idea de sacar el arte de las paredes, de los estudios, de los museos y llevarla a la calle, vestirla.
¿Cómo es tu forma de trabajar? ¿En qué te inspiras?
Para empezar, busco una temática que me inspire a crear, normalmente primero voy al estudio del artista con el que voy a colaborar y al elegir la obra suelen salir temáticas interesantes con los que el artista tiene relación y me sirven de punto de partida para crear la colección.
En general, me inspiro en todo el arte que me rodea y la energía y belleza que las obras me transmiten.
¿Qué materiales utilizas?
«Intento que todos los materiales sean sostenibles o reciclados, para mí es muy importante»
En cuanto a materiales empecé utilizando sedas únicamente, ahora he pasado a muchos tipos de materiales, pero intento que siempre sean sostenibles o reciclados. Para mí es muy importante la sostenibilidad y cuidar nuestro planeta y creo en que cada uno de nosotros pongamos nuestro granito de arena.
¿Por qué empiezas con el kimono?
Mucha gente me pregunta que cual es mi relación con Japón y el kimono. Realmente lo del kimono no vino de Japón, vino que cuando yo empecé con la idea de juntar arte y moda quería empezar con un producto específico en el que se pudiera plasmar la obra de arte y se viera.
Para ello empecé a pensar en que prenda tenía espacio y caída para que se viera bien una obra de arte. En ese momento yo vivía en Dubái y trabajaba para la feria de arte y viendo a las mujeres ahí se me ocurrió hacer abayas para europeas, una vez volví a Madrid, me di cuenta de que llamarlo abayas a lo mejor no era la mejor idea pero que si le hacía un corte frontal podía llamarlo kimono, sin ser (porque nunca he hecho) kimonos originales japoneses, realmente siempre ha sido una abaya con un corte a la que he llamado kimono.
¿Cómo ha sido la experiencia de colaborar con Kausi?
La experiencia de colaborar con Kausi ha sido muy especial para mí, ya que normalmente hago colaboraciones con artistas, pero realmente yo pintaba mucho de pequeña.
Para mí el estudio de mi padre era mi parque para jugar y las pinturas y los lienzos eran mis juguetes, recuerdo cuándo mi padre hacía exposiciones yo me quedaba en la puerta de la galería y en bajito le decía a todos los que iban entrando: «los cuadros los he pintado yo» (ríe). Cuándo me fui haciendo mayor me centré en otras cosas. Para mí el artista es mi padre y de ahí nació mi idea de la marca.
Con Kausi ha sido una experiencia diferente, porque la obra ha salido totalmente de mí y es algo que me ha dado mucha energía para volver a pintar, aparte de crear prendas de vestir, ponerme frente a un lienzo y ver cuál va a ser nuestra historia.
Fuente: Tendencias
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